"Ya no se qué hacer conmigo" es el título de una canción de la banda de rock uruguaya “El Cuarteto de Nos”. La canción habla sobre un hombre que “hace” todos los cambios posibles en su vida y aun así hay una voz en su corazón que le dice: “vos siempre cambiando ya no cambias más” a lo que él contesta: “y yo estoy cada vez más igual ya no se qué hacer conmigo”.
Llamó mi atención el hecho de que, al igual que esta canción, muchos clientes llegan a la consulta con el mismo planteamiento: “he hecho de todo y no sé qué hacer conmigo”, tanto en el ámbito personal como en el organizacional.
“Hacer afuera sin hacer adentro” es diferente a “hacer afuera haciendo adentro”. Podemos pasar por miles de experiencias y, sin embargo, estas experiencias no pasan por nosotros: leemos todos los libros de crecimiento personal y liderazgo, vamos a todos los cursos y talleres y seguimos repitiendo la historia, “ya no se qué hacer conmigo”.
Cuando nos damos el permiso de que estas experiencias “pasen por nosotros”, atraviesen nuestro corazón, nuestros pensamientos, nuestra creatividad, nuestro mundo y “practicamos”, actuamos, lo que hemos aprendido en nosotros mismos, te aseguro que ya sabrás que hacer contigo, en palabras de Paublo Coelho, "dejar de ser quien eras para transformarte en lo que realmente eres": el/la mejor amante, cantante, jefe(a), empleada(a), mujer, hombre, hij@, herman@, padre, madre, maestr@, alumn@, empresari@, dibujante, orador(a), etc.
Para cambiar hay que desear cambiar, saber que se puede cambiar y aceptar las consecuencias de ese cambio. Las posibilidades de cambio están en tu mundo interior, cuando las miras, las tomas y las aplicas pasas del cambio a la transformación! miras la vida y fluyes con el río de la vida! La gente te dice: “ya no eres el/la mism@” “te ves diferente”… Adviertes que todo a tú alrededor se transforma también. Como dice Cristobal Jodorowsky:
“No es que se trate de cambiar, la clave es transformarse, entrar en ese proceso de mutación constante que es el universo. Conservando esa dimensión que es inmutable, entonces cambiar en el fondo es llegar a la inmutabilidad. A la esencia misma que unos llaman lo divino, el dios interior, la condición original. Entonces uno es la mutación dentro de lo inmutable, danzar como una rosa de fuego y quemarse en medio de la inmortalidad.”
Saludos
Yraida Moreno
2 comentarios:
Interesante reflexión. Me gusta tu blog y tu página.
Buenas tardes Yraida, mi nombre es miguel y voy a compartir lo que pienso en contraste o a favor de tu argumento, y es que, cada persona, indibiduo, hombre o mujer, pasa su vida queriendo ser pero no son. Cuando estos empiecen a querer lo que son, ahí relmente serán.
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